¡Mosquis! II

Os dejo otro capítulo de el único cómic cuyo título es un homenaje a Homer Simpson. Dibujada por el gran Juan Andrés Blázquez y guionizada por ese chico tan guapo de la barba y las gafas, que no me acuerdo ahora de cómo se llama. Para ver más grande, clicar en el dibujete ¡Comentad, que es gratis!

¡Mosquis!

Bueno, pues no pudo ser. Como bien sabe Jesulín de Ubrique debido a su carrera musical, buena voluntad no es suficiente. El primer asalto lo hemos perdido, pero seguiremos luchando. Hace un par de posts os decía que estaba empezando a escribir un cómic cómico (de ahí su nombre) con Juanan. Bueno, pues al haber perdido el concurso del Jueves, ya puedo publicarlo. Así que os dejo una entrega. Tengo terminadas 3 más. Y más que vendrá, no nos rendimos. Yo sigo haciendo guiones y Juanan sigue dibujando, creo que quiere cambiar algunas cosas del aspecto gráfico y nos estamos planteando el blanco y negro otra vez. pero esto es, más o menos, lo que hay. Dadme opiniones sinceras, no tengáis miedo de mi ira. Ni de la de Juanan. Yo creo que no lee mi blog. Dadle a la imagen para verla en grande.

¡Se jodió el invento!

Es evidente que los avances científicos y tecnológicos han traído consigo un buen puñado de cosas buenas: Comunicación instantánea a distancia, acceso a información instantánea, avances médicos por un tubo, almacenamiento de una barbaridad de información en el espacio que ocupa un meñique, transporte más rápido y seguro... Un buen puñado, ya digo. Pero sin duda alguna, para mí, lo mejor de la tecnología actual es que cuando algo se estropea, es mucho más divertido y sorprendente. No sé si me explico bien. Voy a poner un ejemplo:

Hace 100 años se te estropeaba el carro y no podía andar. Punto.
Hoy en día, el maletero de mi coche se va abriendo y cerrando si pongo el limpiaparabrisas al uno.

Ya veis a que me refiero? Otro ejemplo: Cuando vivía en Inglaterra al limpiaparabrisas de un colega le pasaba una cosa guay: El chorrino de agua para limpiar el parabrisas (de ahí el nombre) en vez de salir hacia el cristal salía hacia un lateral del coche a tomar por culo. Era muy útil para mojar a la gente por la calle, la verdad. Pero no limpiaba, claro.

O, como decía creo que Joaquín Reyes, en un reloj antiguo que se estropea se paran las agujas. En uno digital que se estropea parece que pone "Culo".

He tenido un mando de la tele que funcionaba, pero con los botones cambiados. Hacer zapping era mucho más guay. Y las teles cuando se estropean también hacen cosas sorprendentes: Que se oiga pero no se vea; Que se pongan los colores en negativo o todo así azulaco; Que se vea un canal pero se escuche otro (Lo juro, lo he visto)

En fin que todo es más sorprendente, divertido y, por qué no, cabreante. Sobre todo por el rollo este de que las cosas ya no se arreglan. A mí me cabrea. Bueno, me quedo aquí esperando vuestros ejemplos. Si no ponéis ninguno, ya no os querré igual.

Cómics

Una de las cosas que más me joden de mí es mi incapacidad de dedicarme completamente a algo. Me entusiasmo por una cosa, le dedico varios meses de entrega absoluta y, sin un motivo concreto, la voy dejando de lado por una nueva. A veces con el paso del tiempo vuelvo a una u otra, otras veces se quedan por ahí en el limbo de los culos inquietos.

Por ejemplo: El Go, del que he comprado libros, abierto cuentas para jugar en internet, recibido clases magistrales de Timón o Rolo, y dejado de jugar por ahora por más de un año. Espero retomarlo en breve. O el RPG Maker, un programa para hacer RPGs sencillos para ordenador que me ha enganchado más que ningún juego. Ahí tengo el juego, aparcado en el primer pueblo. Eso sí, lo poquito que aprendí de programación me valió para sacar una matrícula de honor en la facultad.

En fin, lo bueno de esto es que, así como nunca seré un experto en nada, soy un amateur de muchas cosas. Ahora mismo soy biblioteconomista, bajista, púgil y pretendo ser paseante en breve. (Respecto a bajista, en los enlaces de la derecha podéis ver el de Rock con Pollo, gran grupo musical del que me han dejado formar parte)

Pero si hay una cosa a la que vuelvo una y otra vez es a escribir. Tengo escritos más principios que relatos, pero siempre he querido ser escritor, de verdad. Así que de pronto me he dicho: "Gilipoller, te encanta escribir y te flipan los cómics. Has tardado 30 años en llegar a una conclusión lógica?" No me he respondido, me daba vergüenza. Pero sí, he empezado a escribir guiones de cómics. Y a leer sobre guiones de cómics. Y a leer guiones de cómics. Y a leer cómics distintos a los que suelo leer. He empezado incluso a leer cómics y pensar cosas como "Me parece que los cliffhangers de esta colección son demasiado evidentes"

Creo que aspiro a ser el único guionista de cómics del mundo que no sabe dibujar, pero en eso he tenido una suerte muy cojonuda: Uno de mis mejores amigos desde hace 29 años dibuja de puta madre y está lo suficientemente loco como para querer trabajar conmigo. Así que por ahora hemos hecho poco, entre los dos estamos haciendo una serie cómica (De una págína/capítulo, ya sabéis a qué me refiero) que hemos mandado a un concurso del Jueves. No puede estar publicada, así que no os la pongo, pero en unas semanas que sale el resultado si no ganamos nada la pondré. Y la mandaré a fancines, a revistas, a donde sea. Por dos motivos: 1- Ya va siendo hora de tomarme algo realmente en serio. 2- Está mal que lo diga yo, pero: Joder, somos buenos!

Os seguiré informando de mis avances como comiquero y espero que algún día los podáis ver directamente publicados en papel. Gracias por vuestros ánimos por adelantado!

Excelsior!

Españolito de pro

Os voy a contar los méritos que he hecho yo para ser español:

1- Nacer aquí

Ya.

Creo esos son los méritos de más o menos el 90% de los españoles. El otro 10%, cuyos méritos aunque solo sean los años y pasta del papeleo son ya mayores que los míos, son en muchos casos considerados españoles de segunda (Yo vi al alcalde de Vic decirle a un marroquí nacionalizado que sus hijos no serán españoles)

Pensaba que a esta alturas de la democracia, en los que la gente de mi quinta ha tenido mucho más acceso a la información y a la cultura que la anterior, el hecho de que los derechos de una persona dependan de a qué lado de una frontera nazca nos parecería injusto a todos los que no somos fans de Intereconomía y otros grandes pensadores de esa ralea (sobre todo para los que creemos que las fronteras son líneas dibujadas en un mapa por las que un puñado de reyes y mandamases han hecho que mueran millones de personas) Pero no. Resulta que es al revés, cada vez escucho más burradas no solo en la tele (Ese Rajoy pidiendo que los inmigrantes solo puedan vivir en España mientras coticen. Ole! En vez de finiquito y paro, a tu puta casa! Por qué no legalizamos la esclavitud, que trae menos papeleo?) sino en la calle y hasta en la facultad.

Sigo escuchando a gente de mi edad decir que los extranjeros vienen a quitarnos el trabajo. Pero vamos a ver, para que te quiten algo tiene que ser tuyo. Si a mí me echan de mi curro sin motivo y se lo dan a otro, me han quitado el trabajo. Si alguien viene a mi ciudad a buscar curro y lo encuentra, no me ha quitado nada. Es más, mis colegas que están currando en Alemania, China, Dinamarca, Suiza, EEUU o Irlanda no le están quitando el trabajo a nadie, están trabajando en un puesto para el que están mejor cualificados que un ciudadano de ese país o que estos no quieren (Como cuando yo trabajé en Inglaterra. Inmigrante! Ladrón!)

Total, que no sé si el odio a los extranjeros me jode más por lo que tiene de incultura, de odio a lo diferente o de caradura. Parece que la generación de españoles que emigraban a Alemania a currar nos queda lo suficientemente lejos como para permitirnos mirar otra vez a los extranjeros por encima del hombro, ya somos mejores que ellos otra vez.

En fin, que sé que lo que estoy diciendo a mucha gente le parece obvio y los demás no van a ver nada más que propaganda y tonterías, así que no sé ni para qué lo escribo. Supongo que para marcar mis propias fronteras.

Por si acaso, para acabar con buen sabor de boca, os dejo con lo más inteligente que he escuchado en estos últimos 30 años sobre España.

Lozzzz (Perdidos)

Anoche, como le ocurre a la gente que no duerme por las noches, se me ocurrió una tontuna. Pensé que si se me apareciera un genio y me ofreciera cumplir un deseo, sin trampas de "más deseos" ni nada, pediría recuperar todas las cosas que he perdido a lo largo de los años. Aquí lo bonito ahora sería ponerse filosófico y hablar de la inocencia infantil, los recuerdos, Izquierdo... Pero no, me refiero exclusivamente a lo material.

Recuperaría libros y cómics como para estar leyendo un par de años (si recuperara el hábito de un libro por noche, que últimamente no leo un pijo) Algunos muy chulos, como el primer cómic de la patrulla X (el primero en el que salen Lobezno, Rondador, etc.) o el libro de la Colina de Watership que, para peor, era de mi madre. La verdad es que últimamente y gracias a Iberlibro he recuperado varios, como Rebeldes, que fue el primer libro con el que lloré (siendo un adolescente ridículo), pero pagando, que así no vale.

Recuperaría muchísimos juguetes chulísimos. Cuando pienso en tener hijos pienso sobre todo en poder tener una habitación llena de juguetes. No sé si a él le dejaría entrar, pero sería mi tapadera frente a las visitas. Peazo base de los G.I.Joes voy a tener! Algunos juguetes de cuando era mayor también, cartas de Magic como para empapelar mi cuarto, por ejemplo. Hasta un Mox Emerald!

Varios cuentos, poemas y tontunas escritos por yo que me darían una vergüenza horrible pero a la vez cierta ternura.

Varias camisetas muy chulas (sobre todo de cuando era el mismo adolescente ridículo de antes)

Dinero suficiente para abrir una PYME.

Discos como para escuchar en mi coche en un viaje de aquí a Luxemburgo y vuelta. Casetes como para ponerlos en la carretera en ese mismo viaje y que las ruedas no lleguen a tocar el suelo...

Puede que haya exagerado un poco algunas cantidades. Pero solo un poco. Así que sí, creo que eso es lo que pediría. El único problema es a ver qué hago con todos esos paraguas...

Señor Wences

Ahora que regalan la Interviú los domingos con el Extremadura he descubierto que, aparte de unas fotos de tetas hechas con la clase y estilismo de los peores 80, suele haber un artículo interesante a la semana. El de esta semana trata sobre el Señor Wences, aunque podrían haberse centrado en lo increíble de su vida en vez de en el hecho anecdótico de que era el tío de José Luis Moreno.

Este hombre, por extraño que parezca debido al desconocimiento general que hay sobre él en España (Yo me he enterado hoy de que ha existido, la verdad), es posiblemente el artista español que más proyección y reconocimiento internacional ha tenido de la historia (Lo siento, Ana Obregón, pero esto es así)

Nació en 1896 en Peñaranda de Bracamonte (Salamanca), pueblo que seguramente solo os sonará si habéis estudiado biblioteconomía, porque es la sede de la Fundación Germán Sánchez-Ruipérez. Se llamaba Wenceslao Moreno, de donde sale su nombre artístico. En 1934 ya estaba trabajando en USA como ventrílocuo y malabarista. Fue el artista mejor pagado de la época en el show de Ed Sullivan y actuaba en directo continuamente tanto en Brodway como en Las Vegas. Sus dos marionetas más famosas eran Johnny (su propia mano con un par de ojos pegados y un cuerpecito) y Pedro, una cabeza en una caja que tuvo que improvisar cuando su marioneta normal se destrozó en un accidente de tren. Era un ventrílocuo de los de verdad: Sus peronajes hablaban mientras él fumaba, bebía o hacía malabares con platillos o bastones. Hablaba (y sus personajes) 8 idiomas.

Es un tipo fundamental en la cultura estadounidense, con referencias en todas partes: Los Simpson, Aladdin, Buffy cazavampiros... Cada vez que vemos a un americano en una película o serie haciendo de "ventrílocuo" con su mano, es un homenaje al Señor Wences. Presentó el show de los muppets, actuó en la Casa Blanca delante de 4 presidentes distintos, es el único artista europeo que ha actuado para los soldados americanos. Incluso una calle de Broadway tiene su nombre. Mi gran pregunta es: ¿Por qué coño no lo conocía yo hasta ahora? No puede ser por la distancia temporal, porque no se retiró hasta que cumplió 100 años y murió hace solo un puñado, en 1999 (Con 103, no es mala vida, eh?)

Y lo más importante sobre él: Era buenísimo. (Atención al acentazo español)

Pedantes

Reconozco que me puede. Estaba leyendo una columna del Periódico con la que estaba totalmente de acuerdo hasta que he llegado a las últimas líneas: "El formol del fútbol y la telebasura nos tiene idiotizados". Por supuesto, cuando alguien habla de cómo somos todos de idiotas se cuenta a sí mismo como recurso estilístico, no porque se crea incluido en este mundo de idiotas que no hemos leído más de tres veces el Ulises de Joyce y ponemos de estado en Facebook: "Gran fin de semana, muchas gracias a todos" en vez de citas de Jodorowsky.
La pedantería me revienta. Frases del tipo "la gente es tonta" me parecen repugnantes, porque da a entender la superioridad moral del que la dice sobre el género humano. Pegaría con un palo untado en mierda a quien cree que todos somos unos borregos porque no nos creemos que "los de arriba" quieren acabar con la inteligencia humana mediante fotos trucadas en internet.
Yo me he rodeado de un mundo con una tendencia a la pedantería importante. La mayor parte de los frikis lee mucho, y un porcentaje importante de la gente que lee mucho se cree mejor que los que no. Así que voy a hacer una declaración avinagrada en forma de decálogo sobre mis creencias al respecto:

1- Creo que ser inteligente o culto no convierte a una persona en mejor que otra
2- Creo que creerte mejor que otra persona (que no sea político o banquero) te convierte en peor persona que cualquiera
3- Creo que el hecho de que un libro, un disco o una película le guste a mucha gente no hace que dicho libro, disco o película sea mala
4- Creo que una serie buena es mejor que una película mala.
5- Creo que una película buena es mejor que un libro malo
6- Creo que leer libros es una opción de ocio cojonuda de la que se puede aprender mucho. Creo lo mismo de las series, las películas, el teatro, los deportes, los programas de televisión, las conversaciones en los bares, la radio, la música, etc.
7- Prefiero una película entretenida a una película buena. Ej: Brokeback Mountain tiene grandes actuaciones y una fotografía preciosa, pero me pareció un coñazo insoportable. Hagamos palomitas y vamos a ver "El Último Boyscout"
8- Creo que el hecho de que a una persona le guste un deporte o un programa concreto no le impide pensar, leer o culturizarse de cualquier forma
9- Creo que tener estudios no hace que una persona sea más culta (Esta creencia la he desarrollado durante la carrera)
10- Autocrítica: Probablemente me creo más inteligente de lo que soy. En mi descargo: No me creo mejor que nadie (Excepto los hijos de puta en general)

Una vez declaradas mis creencias, ya sabéis qué hacer: Si os ha sentado mal, miradme por encima del hombro y decid que soy un borrego idiotizado por el mass media. A mí no me molesta, lo celebraré viendo un partido de baloncesto, leyendo un libro y viendo sketches de Faemino y Cansado

Guayfiquemos el mundo

He decidido que hacer un mundo mejor es muy, muy complicado. Cada vez que voy conduciendo detrás de un camión y no puedo adelantarlo porque el cagaprisas de detrás de mí se marca el "Superadelantamiento doble" a.k.a. "Paso de tu culo" lo confirmo: El nivel de hijoputismo es demasiado alto. Por eso he tenido una idea: En vez de hacer un mundo mejor quiero hacer un mundo más guay, en el que cuando una persona sea puteada en vez de cabrearse pueda pasear bajo la lluvia con gabardina y sombrero. Aquí van 4 ideas básicas que he tenido para guayficar un poco nuestra vida:

1. Nuestra propia música de entrada: ¿No habéis visto nunca Pressing Catch? No me digáis que no sería guay que todos tuviéramos nuestra propia música, vídeo y fuegos artificiales para cuando entramos en un bar o en casa de nuestros colegas. O en la cancha. O en el dormitorio, incluso.

2. Debates electorales: Los debates electorales se harán en una cancha de uno contra uno de baloncesto, y todos los temas a tratar serán: "Tu madre es tan gorda...". Total, las soluciones van a ser las mismas, en los dos casos se exagera y miente, pero parece mucho más divertido.

3. Volver a meter piano en el Rock & Roll: Sé que es complicado para las giras, pero joder, qué instrumento más guay para el rock.

4. Bailar a la americana sesentera: O lo que es lo mismo: Los bailes existen, tienen unas formas que hay que saberse y si no las sabes no bailas. ¿Hay algo más guay que 30 personas bailando el "Funky Chicken" a la vez? Yo no lo creo

Os dejo rogándoos encarecidamente que me aportéis vuestras ideas de guayficación y regalándoos un vídeo ejemplo del último punto.

Bender: The movie (Doblando películas)

El jueves vi una película que me gustó tanto que la volví a ver el viernes: "Lluvia de albóndigas". Probablemente la mejor película de dibujos que he visto en mucho tiempo. Probablemente de las mejores películas de los últimos años que he visto. ¿Y por qué me gustó tanto, entre otras cosas? Porque la vi en V.O.S. No voy a ponerme en plan gafaspaster a decir lo mucho que prefiero las películas en versión original a las dobladas (Aunque las prefiero), pero es que esta LA DOBLABA FLIPY! Ya no es solo que me caiga mal (que me cae), es que no es actor de doblaje. Y se nota. Mucho. Mi señora y yo aguantamos un total de 1 minuto de película con su voz. Mi gran pregunta es: ¿Por qué? ¿Qué necesidad hay? ¿Hay realmente gente que vaya a ver una película porque la dobla Flipy? ¿Hay gente que ante la pregunta "¿Quieres ver la nueva película de quien sea?" responde "¿Quién la dobla?"

No es la primera vez que me joden una película por el doblaje: No he podido ver School of rock hasta este año, que la he alquilado en DVD. Soy fan de Jack Black y mataría a Dani Martín del Canto del Loco con un arenque. Ayer por la noche pusieron Kung-foo-sion. No pude verla porque la TDT me dejaba escucharla en chino, pero sin subtítulos. Y me temo que mi chino no es muy bueno. Con esta me pasó igual, solo la he visto alquilando el DVD. El tema de doblar poniendo voces chorra una película que ya es chorra de por sí me descoloca y, por qué no decirlo, me toca los cojones de mala manera.

Mi pequeña pregunta es: Después de haberme jodido por lo menos tres películas que yo recuerde ahora mismo con los doblajes absurdos... ¿Me van a seguir vendiendo la moto de que no puedo ver ni una puta película en V.O.S. en España porque tenemos los mejores dobladores del mundo? Todo el mundo sabe dónde están los mejores dobladores del mundo, y eso es en el año 3000.