viernes, 5 de junio de 2009
Hasta la vista, Bill
David Carradine ha muerto. Ahora mismo la tesis más aceptada, que ya aparece en Wikipedia, es que ha tenido un accidente mientras se ahorcaba durante una masturbación. Si ya me caía bien ahora se ha convertido en un ídolo para mí. Ya lo dije en mi post sobre Garcilaso, soy fan de la gente que muere de forma ridícula. El caso es que en todos los telediarios hablan de la muerte del actor de Kung Fu, que si bien de pequeño me flimpaba, la he intentado ver de mayor y me pareció un coñazo de proporciones monumentales. Sin embargo, en mi memoria, siempre será Bill. Fue un personaje que me resultó tan encantador que estaba deseando que matara a la novia, que por otro lado me cae como el culo. Tenían que haber hecho una película sólo de Bill, esa sí que hubiera sido un triunfo. Así que he decidido hacerle un pequeño homenja dividido en tres desde éste humilde blog que estás leyendo. Primero, una recomendación: Si alquiláis o compráis Kill Bill Vol.2, no os perdáis en las escenas descartadas el combate de Bill contra tres artistas marciales que quieren vengar a su maestro. Segundo, con una frase suya que me parece brutal: “He interpretado 11 obras de Shakespeare, y ese tío escribe bastante bien también, pero para mí, Quentin es el mejor”. Y para terminar, en honor a su relación con las artes marciales, un vídeo de un casting de artistas marciales que me tiene flipado:
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
La verdad es que no mola nada que muera Bill.
A mí tampoco,de hecho preferiría que no hubiera muerto y hubiera muerto (por ejemplo) Jiménez-Losantos. Pero pensaba que el vídeo precisamente a ti te sí que te podía molar.
El video si me mola, pero lo que pasa es que es ya bastante viejo.
ver si nos vemos Mon y tomamos un copazo en honor de Bill.
Ademas con lo fan k soy del negrata kung-fu pense que te lo habia enseñado.
Me molas.
Publicar un comentario